
Una cubierta automática para piscinas es mucho más que un simple accesorio de protección. Además de garantizar la seguridad de la piscina, desempeña un papel clave en la reducción de los costes energéticos, limitando la evaporación del agua y manteniendo la temperatura de la piscina. En un contexto en el que la gestión responsable de los recursos se está convirtiendo en una prioridad, es esencial comprender cómo este equipo puede generar importantes ahorros de energía.
¿Por qué una cubierta automática permite ahorrar energía?
Los propietarios de piscinas se enfrentan a varios factores que aumentan el consumo de energía:- La evaporación: Una piscina sin cubierta pierde varios litros de agua al día, lo que implica una renovación constante y, por tanto, un mayor consumo.
- La pérdida de calor: El agua se calienta de forma natural por efecto del sol, pero sin protección, el calor se disipa rápidamente, lo que requiere una calefacción más frecuente.
- El uso intensivo del sistema de filtración: Una piscina expuesta a impurezas requiere un tiempo de filtración más largo para mantener el agua limpia.
Una cubierta automática actúa sobre estos tres elementos limitando la evaporación, conservando el calor y reduciendo la acumulación de residuos, lo que disminuye la necesidad de filtración y productos de mantenimiento.
1. Reducción de la evaporación y de las necesidades de agua
La evaporación es uno de los principales factores de pérdida de agua en una piscina. Cuanto más grande sea la piscina y más expuesta esté al viento y al sol, mayor será la evaporación. Cubriendo la piscina después de cada uso, una cubierta automática evita esta evaporación y limita la necesidad de rellenarla.Ventajas: - Menos agua perdida a diario. - Reducción del consumo de agua, especialmente útil en períodos de restricciones.
- Estabilidad de los productos químicos, que requieren menos adiciones para mantener el equilibrio del agua.
2. Conservación del calor y reducción de las necesidades de calefacción
Mantener una temperatura agradable en una piscina climatizada supone un importante coste energético. El uso de una cubierta automática reduce la pérdida de calor nocturna y evita que el agua se enfríe.Efectos concretos:
- Mantiene una temperatura estable entre 3 y 5 °C más que una piscina descubierta.
- Reduce el consumo de energía de las bombas de calor o los calentadores eléctricos.
- Optimización de los períodos de baño con agua más caliente de forma natural.
3. Reducción del tiempo de filtración y de los costes de mantenimiento
Las impurezas que caen al agua (hojas, insectos, polvo) obligan al sistema de filtración a funcionar durante más tiempo. Una cubierta automática evita que estos elementos entren en el estanque, reduciendo así la carga de trabajo del filtro.Impacto en la filtración:
- Menos limpieza del filtro y, por tanto, una mayor vida útil.
- Menos electricidad consumida para hacer funcionar la bomba.
- Menos desinfectantes necesarios gracias a un agua mejor protegida.
Los diferentes tipos de cubiertas automáticas y su impacto energético
Existen varios tipos de cubiertas automáticas, cada una de las cuales tiene un impacto diferente en la conservación de la energía.1. Las persianas enrollables
Las persianas enrollables están compuestas por láminas de PVC o policarbonato que flotan sobre el agua. Los modelos de policarbonato transparente pueden incluso captar y devolver la energía solar. Ventajas: Excelente conservación de la temperatura. Protección óptima contra la evaporación. Compatible con piscinas climatizadas. 2. 2. Las cubiertas con barras. Estas cubiertas combinan una lona reforzada con barras transversales rígidas que garantizan una mayor seguridad. También protegen contra la pérdida de calor y la evaporación.Ventajas:
- Más asequible que un toldo enrollable.
- Buen aislamiento térmico y seguridad.
- Fácil de instalar y usar.